Los especialistas trabajan en 18 combinaciones de fibra con nanopartículas de plata.
Un equipo de especialistas del Cinvestav Mérida ha diseñado una serie de tejidos con propiedades antibacterianas y capaces de regular el calor a través de la combinación de la fibra de algodón con nanopartículas de plata.
Los especialistas han diseñado 18 diferentes tejidos que garantizan una protección contra poblaciones bacterianas de ambientes marinos naturales de la península de Yucatán, como los cenotes, pantanos y playas así como de cultivos bacterianos de referencia, en este caso Escherichia coli y Staphylococcus aureus.
Además, los textiles mostraron que sus propiedades bactericidas son más significativas con las del tipo Gram-negativas, varias de ellas presentes en ecosistemas costeros y que son potencialmente patógenas.
Estos resultados fueron posibles al combinar nanopartículas de plata, metal con excelentes propiedades bactericidas y de transferencia de calor, con algodón, una fibra natural que ayuda a la creación del material inteligente.
El estudio estuvo encabezado por la estudiante Lilián Pérez Delgado, del programa de Doctorado en Ciencias con especialidad en fisicoquímica del Cinvestav Mérida, bajo la dirección de Geonel Rodríguez Gattorno, investigador del Departamento de Física, y en colaboración con otros investigadores e investigadoras.
“Decidimos enfocarnos en los parámetros de preparación que pueden potenciar de forma combinada la transferencia de calor y el efecto bactericida. Esto porque definir las condiciones más adecuadas para la síntesis de los materiales compuestos de algodón y nanopartículas metálicas podría tener implicaciones en el desarrollo de telas útiles en el sector de la salud o en el ámbito deportivo, por mencionar algunos”, explicó Rodríguez Gattorno.
El estudio fue publicado en la revista científica Nanomaterials.
Con esta publicación, los especialistas de la institución yucateca demostraron el desarrollo exitoso de 18 tejidos de algodón recubiertos con nanopartículas de plata para obtener materiales multifuncionales.
En el trabajo también participaron investigadores de los departamentos de Física Aplicada y de Recursos del Mar, ambos del Cinvestav Mérida; así como del Instituto Tecnológico de la capital yucateca.
Fuente: La Jornada Maya